La característica principal de todos los modelos de CIP es garantizar la circulación interna del sistema de agua y productos químicos de limpieza. Estos sistemas totalmente automáticos cuentan con un dispositivo de medición de conductividad para lograr ahorro de productos químicos.
Los tanques de solución química, que son parte del sistema, permiten recuperar los productos químicos. Los sistemas CIP pueden diseñarse con diferentes capacidades y características según las necesidades. Pueden tener capacidades que varían de 7,000 l/h a 50,000 l/h, admitir múltiples tipos de productos químicos, y ofrecer opciones de saneamiento térmico o desinfección química.